El Instituto Superior del Profesorado N° 16 Dr. Bernardo Houssay cuenta desde junio de este año con su propio Protocolo contra la discriminación y violencia hacia las mujeres y diversidades sexuales. Fue elaborado por iniciativa de la Secretaría de Género y Diversidad del Centro de Estudiantes del 16, que conduce la agrupación Pocho Lepratti. La meta central de este documento es la prevención de este tipo de violencias.
Marianela Ortega es estudiante de 3er año del profesorado de biología, integra la Pocho Lepratti y es la secretaria de Género y Diversidad del Centro de Estudiantes. Ofrece detalles de cómo se pensó y se concretó este protocolo, un trabajo que desde el inicio define como colectivo, abierto y que convoca a ser leído: “La primera invitación es a leerlo, conocer que hay un espacio y una herramienta que nos escucha”.
Pone especial acento en marcar que el protocolo “es un proyecto que surge del estudiantado y que fue trabajado en conjunto, colectivo, con docentes que dedicaron de su tiempo libre para acompañar”. Para su elaboración se dieron “reuniones abiertas a cualquier persona de la comunidad educativa que quisiera participar”.
Esas reuniones comenzaron el año pasado, de a poco se fueron sumando estudiantes, docentes, se dieron charlas y se puso a consideración el borrador de un protocolo elaborado por otras estudiantes años anteriores, pero que no pudo concretarse. “Lo leímos, pusimos en común y luego llegaron las sugerencias también de las compañeras de la agrupación No pasarán”, repasa Marianela.
La estudiante habla de las metas que se propusieron alcanzar con el documento y destaca el carácter preventivo y de acompañamiento: “Nosotres primero nos planteamos una serie de objetivos, qué buscamos con este protocolo. Lo primero es que no es punitivo, sino que nos centramos en la prevención de la violencia y la discriminación; erradicar situaciones de violencia y discriminación que puedan surgir, y asesorar, acompañar, escuchar a cualquier persona de la comunidad educativa que lo necesite; y ante una situación concreta abordarla y ver de qué manera se puede solucionar. Pero sobre todo nos basamos en la prevención de situaciones de violencia”.
El protocolo fue presentado en una jornada institucional del Profesorado 16. Foto: Secretaría de Género (CE).
El protocolo fue presentado en una jornada institucional el 2 de junio pasado, “en la semana del Ni una menos” -destaca Marianela-. En esa presentación hubo un panel integrado por Florencia Rovetto, secretaria del Área de Género y Sexualidades (UNR); Laura Tinirello, abogada de la Oficina de Violencia Doméstica y de Género del Ministerio Público y Luciano Fabbri, doctor en ciencias sociales, quien coordina talleres de masculinidades.
Para la estudiante, resulta clave el apoyo del rector Pedro Dabin, y de las autoridades del Instituto 16 en este trabajo. “El instituto se compromete en la ayuda de la puesta en práctica del protocolo y para que se implemente de manera efectiva. Tenemos un apoyo grande de la institución porque nunca nos dijeron que no”, destaca.
El texto del Protocolo contra la discriminación y la violencia hacia las mujeres y diversidades sexuales en el ámbito del ISP N° 16 -tal su nombre completo- puede leerse en el Recursero en línea.
El Recursero se presenta como “un espacio creado por la Secretaría de Género y Diversidad del Centro de Estudiantes del Instituto Superior del Profesorado N.º 16 Dr. Bernardo A. Houssay”, que reúne “una serie de recursos de utilidad (mayormente normativas) con el fin de informar y sensibilizar acerca de la discriminación y la violencia hacia mujeres y diversidades sexuales, así como también líneas telefónicas y centros de asistencia a los que acudir en la ciudad de Rosario, Santa Fe”.
Un panel integrado por especialistas en género y diversidad presentó el protocolo. Foto: Secretaría de Género (CE)
En el texto del protocolo se señala que el documento tiene “varios objetivos relacionados a promover acciones que favorezcan la visibilización, sensibilización y producción de conocimiento acerca de la perspectiva de género y la necesidad de actuar efectivamente contra cualquier forma de discriminación, imposición y/o violencia de cualquier tipo”.
Presentadas estas metas, entre otras propuestas contenidas se leen las de “promover acciones destinadas a la prevención de la violencia de género y asesoramiento para la asistencia integral de las personas que padezcan situaciones de violencia enmarcadas en la ley 26.485 en diferentes acciones y conductas, por acción u omisión, de las personas que conforman ésta institución”.
Otros fines del protocolo son los de “adoptar medidas tendientes a promover la erradicación de la discriminación y desigualdad de género” y “establecer canales de información, comunicación y diálogo que efectúen la difusión de los instrumentos institucionales y marcos normativos vigentes”.
También contempla como metas la de “contribuir de forma efectiva al abordaje de consultas acerca de situaciones de discriminacion y/o de violencia de género” y la de “acompañar a las personas consultantes en la contención y atención integral ante su caso y situación”.
Fuente : redaccionrosario.com
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