El Ministerio de Defensa ruso denuncia que nacionalistas sembraron minas y destruyeron los servicios públicos en Mariúpol.
El jefe del Centro Nacional de Gestión de Defensa de Rusia, coronel general Mijaíl Mizíntsev, alertó este sábado sobre la grave situación humanitaria que padecen los residentes de la ciudad ucraniana de Mariúpol, donde son retenidos por fuerzas nacionalistas.
"La población civil (en Mariúpol) se ve obligada a sobrevivir en condiciones inhumanas: sin calefacción, electricidad, abastecimiento de agua, alimentos y medicamentos", alertó el coronel general Mizíntsev.
Al mismo tiempo, la autoridad militar rusa detalló que los nacionalistas destruyeron los servicios públicos esenciales y han plantado minas, lo que impide a los residentes de la ciudad desplazarse, "cientos de miles de personas, incluidos extranjeros, están retenidas a la fuerza por nacionalistas", acotó.
Mizíntsev expresó que ante la dramática situación, Moscú continúa con los corredores humanitarios, aunque reiteró que ni un solo corredor es confirmado y apoyado por las autoridades ucranianas, "ni un solo corredor humanitario hacia la Federación de Rusia ha sido confirmado de nuevo por el Kiev oficial, lo que demuestra una vez más la indiferencia de las autoridades actuales hacia su propio pueblo", puntualizó.
Las autoridades militares en Moscú denunciaron a grupos nacionalistas y soldados ucranianos de incumplir con el acuerdo de cese al fuego, "violan cínicamente los acuerdos alcanzados", agregan.
"Al mismo tiempo, los nacionalistas no solo no dejaron de disparar en Mariúpol, sino que desde las 9H30 (hora local) los equipos de vigilancia objetiva, incluido el uso de drones, registraron un aumento de su intensidad en dirección a los corredores humanitarios", concluyó Mizíntsev.
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