Julián Venegas y José Santucho presentan Ambulantes, un disco conceptual que retrata a vendedoras y vendedores que hacen de la calle su espacio de trabajo a través de sus trece canciones. Esta vez lo ofrecen como espectáculo musical para hacer temporada los sábados de septiembre en el Cultural de Abajo.
José y Julián se conocieron por ser parte de “la comunidad musiquera rosarina” y “tener amigos en común”.
“Personalmente nos conocimos cuando él (José) me convida una canción suya de su disco Juglaría. Me invita a cantarla en la presentación de su disco” -recuerda Julián.
A partir de ahí resultaron muy evidentes las coincidencias respecto a posicionamientos estéticos y respecto a la canción popular. “En esa sintonía compartimos también un interés por estos trabajadores ambulantes, cada uno a su manera venía estudiándolos, en el sentido de empezar a cantarles, empezar a observarlos de otra manera, empezar a transformarlos en canciones o en cantos, y de una guitarreada en el patio de mi casa a donde José llegó con cinco canciones terminadas en ese concepto de los ambulantes, redondeamos o cayó la ficha de que teníamos que hacer un trabajo conceptual. Primero por las ganas, segundo porque sentíamos que habíamos encontrado un tesoro, una inspiración que los que nos dedicamos a la música popular estamos buscando constantemente, temáticas transversales, de amplia resonancia comunitaria y popular y también nos interesaba este trabajo porque veíamos que no se había hecho o por lo pronto nosotros no conocíamos un trabajo similar, si a laburantes rurales pero no a trabajadores callejeros de las ciudades” -abunda Venegas.
Los músicos hallan una fuerte relación “entre la práctica de la canción popular, que busca siempre proximidad, que busca siempre descripciones nuevas de la realidad, temáticas quizás que se repiten a lo largo de los años pero que siempre se resignifican y se encaran de manera distinta” y el trabajo de los ambulantes.
La canción popular resalta “temáticas que se preocupan por un sujeto colectivo más que por las particularidades y las individualidades”.
En el espectáculo intimista que traen a escena, dos guitarras, voces y percusión se encuentran en directo con el público. El disco tocado en vivo rememora la condición ambulante de los viejos trovadores donde la historia contada y cantada excede lo individual y describe una historia colectiva.
“Encontramos en la canción popular también una práctica que puede llegar a prescindir de la tecnología, de grandes avances tecnológicos, los usa pero entendemos que la esencia de la canción popular puede incluso hasta prescindir de tecnologías avanzadas y practicarse solamente con instrumento y voz o instrumentos y voces. En esa sintonía y por la simpleza en definitiva de la canción popular, la simpleza y la profundidad de la canción popular, encontramos resonancia también en trabajadores ambulantes que con lo mínimo indispensable, con su manufactura, con su pregón, recorren estratégicamente calles, plazas, barrios, buscando el pique, dónde es más propicia la venta y en ese sentido también entendemos que la canción popular practica algo similar”.
El cantor popular “está con una antena amplia del ambiente, igual que un vendedor ambulante”.
Para Julián “la práctica de la canción popular agiliza o propone agilizar una antena social, contempla el contexto a la hora de decir, no impone temáticas sino más bien trata de observar cuáles son las temáticas comunes que puedan tener resonancia comunitaria y a partir de ahí se escribe. En ese sentido los ambulantes también son buenos observadores de contextos, de ambientes, de territorios donde son más propicias las condiciones de poder vender su producto”.
Esta temporada de Ambulantes que proponen llega luego de una gira por las provincias de Santa Fe y Buenos Aires en el que su disco se fue encontrando con un público de amplio rango etario, es una temática que atraviesa varias generaciones.
“El repertorio está en su mayoría integrado por canciones de autoría propia, yo metí mano en tres canciones. Hicimos trabajo en complicidad con José, letra de él y música mía, pero la mayor parte de las canciones en letra y música son de José Santucho. También pedimos prestadas otras canciones del cancionero popular como es el caso del Afilador de Emilio Magaldi y (Francisco) Pracanico, como es el caso de Jaime Roos con El Grito del Canilla, como es el caso de Juan Barreto a quien le pedimos prestada la canción dedicada a los churreros y a los cartoneros” -detalla Julián.
A la hora de hacer las canciones los músicos tuvieron en cuenta las características pregoneras de algunos oficios, “incluso algunos instrumentos como la corneta del churrero o la flauta del afilador, como el Para Elisa del heladero” fueron usados para construir algunos estribillos, y gracias a esa complicidad que los vincula hubo mucha confianza a la hora de componer.
“La práctica que solemos tener es que él propone una letra en base a una conversación que tenemos respecto algunas temáticas, cómo podemos encararlas, qué queremos decir, a partir de esas conversaciones en común José propone una letra, siempre en forma poética y después yo intervengo con música esas palabras. Así se dieron las canciones que construimos en complicidad” -destaca Venegas.
Para José y Julián “la canción popular se define también por una variedad temática que tiene que ver con una observación de la realidad que contrasta con temáticas impuestas en canciones de mercado, en canciones hechas para ser popularizadas más que populares, principalmente la temática en esos casos está relacionada al amor, al amor romántico”. Esas temáticas “evaden otro tipo de observaciones, otro tipo de poesía, otro tipo de metáforas, sobre todo más transformadoras”.
“Creemos que las transformaciones siempre están acompañadas de canciones y que para que eso suceda la canción tiene que buscar resignificar y correr las cosas de lugar para propiciar esas transformaciones y en ese sentido la calle, la realidad que observamos, la observación en definitiva del mundo es una herramienta fundamental, es una antena indispensable para entrar en la sintonía de las temáticas de las canciones populares y es una batalla, hoy en día, muy grande que estamos dando sobre todo con el uso de la tecnología, específicamente con el uso del celular y el predominio de esa práctica por sobre cualquier otra observación de la realidad” -analiza Julián.
Ambulantes, el espectáculo musical de Julián Venegas y José Santucho tomará el escenario del Cultural de Abajo (Entre Ríos 579) los sábados de septiembre a partir de las 21hs. Se pueden hacer reservas al +5493412297187.
Fuente : redaccionrosario.com
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