Unos 19 muertos y cientos de heridos, según datos oficiales de la Defensoría del pueblo, ha dejado la ola de protestas y represión policial en los últimos días en Colombia. Aunque según datos de la ONG Temblores, son 26 las víctimas fatales, mucho más los heridos y detenidos, y peor aún, hasta unos 9 casos de violencia sexual por parte de la fuerza pública, ha registrado.
Pero esta expresión popular no ha sido cualquier expresión popular. Ya para muchos representa el segundo estallido social en Colombia. Una nación que, a la luz de lo observado en los últimos años, ya venía en ebullición.
Hoy, la nación suramericana vuelve a ser vista con gran preocupación desde la comunidad internacional. De hecho, la Oficina de la Alta Comisionada para los DD.HH. de la ONU emitió un comunicado al respecto, y dice estar trabajando para verificar el número exacto de víctimas y denuncias.
América Latina y sus países parecen repetir errores del pasado, por los cuales, los pueblos se han levantado en rechazo. La historia parece ser ya conocida. Una propuesta de reforma tributaria, que conlleva aumentos de impuestos a la canasta básica, a bienes y servicios, entre otros puntos, que al final afectan más al bolsillo de los que llevan la peor carga de la difícil situación económica, producto de malas gestiones gubernamentales y, desde el 2020, la pandemia.
Y aunque el presidente Iván Duque retiró el proyecto, días después de la resistencia popular ante la brutalidad policial, de todas formas insiste en aplicar otra norma, que en teoría no llevaría los polémicos puntos que derramaron el vaso del malestar ciudadano.
De igual manera, muchos interrogantes quedan, y habrá quizás que tratar de comprender si lo acontecido en la nación neogranadina, no solo es el intento de aplicar una ley en desmedro de los más necesitados, sino un modelo que ya lleva años dejando más pobreza, división y tensiones sociales.
En esta edición de Detrás de la Razón, por HispanTV, pondremos el foco del debate junto a nuestros expertos en la materia, sobre este nuevo estallido social en Colombia, y más allá de las reformas tributarias, significa la búsqueda de un freno al modelo neoliberal de años, implementado en esa nación.
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