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La proclamación del último viernes del sagrado mes de Ramadán como el Día Mundial de Al-Quds ha cambiado la ecuación de poder a favor de los grupos de la Resistencia.

Tras la victoria de la Revolución Islámica en Irán en 1979, hubo un cambio copernicano en la estructura y los objetivos de los grupos de la Resistencia de Asia Occidental. Antes de este hecho histórico, los grupos de la Resistencia en Palestina y en otras partes de la región confiaban en el “nacionalismo árabe” como un factor clave en la defensa de los palestinos ante la agresión israelí.

De hecho, existía el sentimiento en la Resistencia de que podía crear una especie de cohesión y coordinación entre las naciones y los Ejércitos árabes basándose en la fraterna raíz de la “etnia árabe”. Por lo tanto, este tema por sí solo se había convertido en un gran desafío en el camino de la resistencia contra Israel, ya que tal actitud redujo la dimensión de la guerra del “sionismo contra el mundo islámico” a un conflicto “israelí-árabe”.

Sin embargo, en agosto de 1979, el fundador de la República Islámica de Irán, el Imam Jomeini (la paz sea con él), instituyó el Día Mundial de Al-Quds para incitar a todas las personas libres del mundo a expresar solidaridad, a nivel internacional, a la causa palestina frente a la ocupación israelí.

Principales objetivos de la celebración del Día Mundial de Al-Quds

• Neutralizar el plan de eliminar a Palestina del mapa geográfico
• Reclamar los derechos legítimos del pueblo palestino
• Relevar el simbolismo de esta fecha: la confrontación de los oprimidos contra los opresores
• Evidenciar de manera tangible el apoyo de las naciones a Palestina
• Reivindicar la consigna de los pueblos libres del mundo a expresar su voluntad y opinión ante la causa palestina

Tras más de cuatro décadas, la rememoración de este día rebasó las fronteras de Irán y llegó a todos los pueblos libres del mundo, al margen de confesiones religiosas.

El Día de Al-Quds es un grito de rechazo a la ocupación de la ciudad santa y un llamado a liberarla de la injusticia y la opresión. En este día, los libres del mundo se manifiestan antes del rezo colectivo del viernes, portan pancartas e imágenes con el fin de denunciar las políticas expansionistas del régimen de Tel Aviv contra la nación palestina.

Este día goza de un sentido mucho mayor que el rechazo hacia las políticas de Israel, puesto que demuestra la unidad de los musulmanes y los libres del mundo ante la injusticia.

El Día Mundial de Al-Quds se ha convertido en el símbolo de unidad, integridad y cohesión entre las naciones musulmanas ante la causa palestina y la ocupación de Al-Quds, como el tema más importante del mundo islámico.

Las naciones musulmanas que buscan la libertad realizan ceremonias, rituales y manifestaciones para apoyar los derechos de los palestinos a gobernar su propio y milenario país y decidir su propio destino, así como los derechos de los refugiados palestinos a regresar a su tierra natal.

Los participantes en las manifestaciones quieren revelar la naturaleza criminal de Israel y subrayan que este último es el enemigo principal y común de las naciones musulmanas y de todos los seres humanos.

Desde entonces, las naciones musulmanas y libres de todo el mundo cuentan los días hasta la concreción de lo persigue el Día Mundial de Al-Quds, ya que saben que este día es una fecha crucial y es un día divino.

Día Mundial de Al-Quds desbarató cálculos de Israel

Con la designación de este día, el Imam Jomeini (p) desbarató los cálculos de los sionistas y aquellos regímenes árabes de la región que están tratando de minimizar la trascendencia del Día Mundial de Al-Quds son, de hecho, mercenarios del régimen israelí.

Cualquiera que tenga una pizca de conocimiento se dará cuenta de que la República Islámica de Irán ha desempeñado el papel más crucial en el apoyo a la causa palestina a lo largo de los años. Desde la victoria de la Revolución Islámica, el país persa ha luchado para frustrar los planes contra Palestina.

La República Islámica de Irán ha apoyado la cuestión palestina en todos los ámbitos y no ha permitido que la bandera de la Resistencia palestina sea arriada. Uno de los mayores frutos de la victoria de la Revolución Islámica se manifiesta en el Día Mundial de Al-Quds.

La verdad es que las ecuaciones regionales han cambiado drásticamente. Israel ha hecho nuevos cálculos y sabe que, hoy en día, ya no puede subestimar el poder de la Resistencia como lo hizo en el pasado. Los acontecimientos actuales muestran que, en un futuro cercano ni Estados Unidos, ni los sionistas tendrán papel alguno en la región de Asia Occidental.

Por Mohsen Khalif Zade

Fuente :

hispantv.com