El mandatario promulgó la ley de reforma constitucional que permite que las próximas elecciones se realicen en dos días.
A pesar del rechazo de la oposición, Chile acudirá a las urnas este sábado 11 y 12 de abril con el fin de evitar las aglomeraciones por la pandemia de la Covid-19, de acuerdo a la ley firmada por el presidente Sebastián Piñera.
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El domingo pasado, el mandatario promulgó la ley de reforma constitucional que permite que las próximas elecciones se realicen en dos días.
Desde el Palacio Pereira, uno de los dos recintos que tendrán los integrantes de la Convención Constitucional para trabajar en la redacción de la nueva Constitución, Piñera afirmó que “los ciudadanos tienen que ir a votar una sola vez, pero podrán elegir entre hacerlo el día sábado 10 o el domingo 11“
La inédita medida fue propuesta por el gobierno y aprobada por el parlamento, bajo el argumento de que son más de 14.000.000 de chilenos y chilenas que en abril están facultados para participar en una elección que ha sido catalogada como “la más importante de los últimos años” y que advierten que tendrá una alta participación.
Esta es la elección más grande de la historia chilena por número de candidatos y cargos de elección popular, y una de las más trascendentales, ya que ese día se definirán los nombres de los 155 ciudadanos que redactarán una nueva Constitución que será sometida a un plebiscito en 2022.
Junto con ellos también serán elegidos 345 alcaldes, 2.252 concejales y 16 gobernadores regionales, lo que suma un total de 2.768 puestos en disputa.
La iniciativa entrega facultades especiales al Servicio Electoral (Servel) para dictar normas e instrucciones sobre la constitución de las mesas receptoras de sufragios, la determinación de horarios preferentes de votación a diferentes grupos de personas.
Además del procedimiento de cierre de jornada y sellado de urnas del día 10 de abril de 2021, así como el de reapertura de votación el día 11 de abril de 2021.
Además, el proyecto establece que la custodia de los sufragios corresponderá al delegado de la Junta Electoral y al Servicio Electoral.
Ellos deberán coordinarse con el Ministerio del Interior y Seguridad Pública y el Ministerio de Defensa Nacional para el resguardo y la mantención del orden público, y la custodia del lugar donde se guarden las urnas y los útiles electorales, lo que se realizará con el auxilio de las Fuerzas Armadas y Carabineros de Chile.
En tanto, las urnas electorales serán selladas y reabiertas al día siguiente por los vocales de mesas, sin perjuicio de que podrán estar presentes los apoderados acreditados ante la mesa de votación.
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