Ángel Horacio Molina es licenciado en ciencias políticas, forma parte del grupos de trabajo “Medio Oriente y América Latina" y “Palestina y América Latina”. En una entrevista con AGENCIA PACO URONDO ofreció múltiples lecturas sobre la disputa histórica.
Por Juan Borges
Ángel Horacio Molina es licenciado en ciencias políticas, especializado en el conflicto de Medio Oriente. Además, forma parte de los grupos de trabajo “Medio Oriente y América Latina “y “Palestina y América Latina”. En una conversación con AGENCIA PACO URONDO ofreció múltiples lecturas sobre la disputa histórica. "El proceso de colonización comienza bastante antes de la ocupación israelí en 1948. Comienza con los primeros colonos y su vinculación con los antiguos ocupantes invasores que por aquel entonces eran las tropas británicas. La colaboración sionista con Gran Bretaña ha sido clave y racial para entender el triunfo sobre el imperio Otomano en aquellas épocas".
APU: ¿Para entender la situación actual es necesario retroceder 73 años?
Horacio Molina: Sin dudas para entender lo que está sucediendo ahora no podemos desvincularlo de un proceso muy largo que arranca incluso antes de la ocupación Israelí. Arranca con el establecimiento de comunidades provenientes de Europa, asentándose paulatinamente en territorio Palestino con momentos de pico de ofensiva. Una de las cuestiones que debemos tener en cuenta a la hora de intentar entender el escenario actual es no reducir a mirar solo el acontecimiento actual sino analizarlo en el marco de un proyecto colonial de larga data que tiene etapas, momentos, con diferentes estrategias de colonización y en diferentes etapas. En Jerusalén Este lo que realmente estalla tiene que ver con un proceso de “despalestinizacion”. Se da esto en un momento muy adverso para Palestina debido a crisis políticas internas y por el apoyo cada vez más contundente de Estados Unidos a Israel hasta en lo simbólico en sus proyectos colonialistas, se da un estallido Palestino que logra condensar el sentimiento de resistencia a lo largo y ancho de la Palestina ocupada uniendo Gaza con Cisjordania que es justamente el proyecto antagónico al impulsado por Israel que es justamente fragmentar estos dos territorios.
APU: ¿Qué intereses persigue y representa el Estado de Israel?
HM: Israel ha avanzado gradualmente hacia la fagocitación del territorio palestino en su totalidad con políticas diferenciadas para Gaza y Cisjordania a través del establecimiento de colonias Israelitas y la expulsión de población palestina intentando implementar la imposibilidad de crear un estado palestino, apenas quedan islotes de población palestina rodeados por colonos y militares israelíes. Sería absurdo reducir el reclamo de Palestina a un simple reclamo de derechos civiles. En el caso de Gaza la situación es distinta porque es utilizada como un enclave con políticas hacia adentro de la política israelí. Gaza es el lugar donde se concentran los discursos del miedo ,ahí está la resistencia islámica por eso siempre es el punto de ataque militar de Israel ,se los provoca y se los ataca permanentemente buscando desatar una escalada militar que le permite siempre a Israel utilizar tecnología militar en el terreno con mucha población ,probar su armamento antes de exportarlo y colocarle después el sello “probado en combate “.Estos ataques retroceden veinte años las estructuras edilicias de Gaza cada vez que se realizan los bombardeos y ataques.
APU: ¿A que se denomina sionismo?
HM: El sionismo como movimiento tiene varias tendencias, hay uno de “izquierda”, que añora los colonos de matriz socialista que formaron sus kibutz, hay una teoría del laborismo israelí detrás de esta idea. Por otro lado, tenemos el sionismo de derecha claramente vinculado con un proyecto occidental desvinculado de lo árabe y asiático. Y también un sionismo religioso de derecha que hace su lectura apocalíptica y mesiánica de lo que sucede. En todos los casos el sionismo supone un proyecto colonial que coloca a Palestina como un territorio despoblado y el mito de “un pueblo sin tierra para una tierra sin pueblo”. Hay una negación absoluta del árabe que vive ahí.
APU: ¿Qué es la “NAKBA” o catástrofe Palestina?
HM: Es una muy buena manera de definir y contraponer desde lo que fue la ocupación del Estado de Israel del territorio palestino desde una mirada del oprimido. Esto que se conmemora institucionalmente año tras año con las embajadas en distintos países, pero cada año se celebra la mirada desde el opresor, Israel, ellos lo ven como un triunfo en una guerra por la independencia. Para los palestinos contrariamente es la catástrofe, el inicio de un proceso de criminalización, expulsión y exterminio de su territorio, sus habitantes y su historia. El objetivo es despalestinizar y judaizar el territorio ocupado. La NAKBA señala el inicio de esta catástrofe que es celebrado por Israel y sus países auspiciantes. El pueblo palestino se limita a resistir y a recordar con dolor ese proceso que aún sigue en marcha.
APU: ¿Cuándo se inicia el proceso de colonización y terror?
HM: Ese proceso de colonización comienza bastante antes de la ocupación israelí en 1948. Comienza con los primeros colonos y su vinculación con los antiguos ocupantes invasores que por aquel entonces eran las tropas británicas. La colaboración sionista con Gran Bretaña ha sido clave y racial para entender el triunfo sobre el imperio Otomano en aquellas épocas. La guerra de los seis días marca cuando se da inicio la mayoría del territorio palestino ya estaba ocupado por el Estado de Israel, tan solo quedaban Gaza y Cisjordania que se terminan de perder en la guerra de los seis días. Esta guerra desarma el mito de la invencibilidad del ejército israelí, desde esa guerra y hasta la actualidad se demostró que ese ejército no es invencible. En 1973 se desata otro enfrentamiento bélico que si no hubiera sido por la intromisión de Estados Unidos Israel la hubiera pasado muy mal. En el año 2000 Hezbolla expulsa a Israel del Líbano. Parte de la retórica y el mito de la invencibilidad del ejército israelí es totalmente falso.
APU: ¿Por qué actualmente Israel emprendió esta ofensiva tan violenta?
HM: Actualmente el gobierno actual de Israel se encontraba en una situación muy complicada electoralmente muy difícil. Netanyahu enfrenta cargos de corrupción muy graves, hay un malestar en la sociedad israelí que tiene que ver con situaciones internas y políticas. Esto abrió la puerta desde el gobierno a sectores recalcitrantes del Sionismo que se han dedicado en estos últimos meses a montar distintas provocaciones a la población palestina. Esto llega a su punto más alto cuando deciden expulsar a un conjunto de familias palestinas en uno de los barrios de Jerusalén Este par entregar esas tierras a colonos israelíes. Esto genera la respuesta de la resistencia Palestina y a esta reacción Israel responde con una represión muy violenta que se traslada hasta la explanada de la mezquita y esto genera la reacción de Hamas desde el otro lado del territorio palestino. Lo cual es natural teniendo en cuenta que es una milicia popular de defensa del pueblo palestino que sufrió en esos ataques miles de pérdidas de manera altamente violenta. Ningún Estado Árabe se comunicó con los palestinos que sufrieron el ataque. Arabia Saudita y Egipto junto con otros Estados Árabes presionaron a Hamas para que cesaran en sus ataques hacia Israel. Por lo tanto, pensar que este conflicto se va a solucionar por vías diplomáticas es inocente.
APU: ¿Cuál es la perspectiva que se puede avizorar para el futuro próximo?
HM: Lo que conversábamos con Claudia Rabino Vich es que en este escenario actual se ve que Israel pretende llevar el conflicto hasta un punto limite hacia una escalada brutal mucho mayor que la que hemos visto en estos días. En este marco hay elementos muy interesantes para tener en cuenta, cuando veíamos desde los espacios de análisis de la causa árabe y desde lugares de análisis una crisis profunda y una fragmentación del frente pro palestino surge un proceso de resistencia palestino que se van replicando en distintas ciudades palestinas y permite observar demostraciones de apoyo en toda la palestina ocupada. Esto nos permite ver la voluntad de resistencia en el pueblo que es muy optimistas. Más allá de los análisis institucionales adentro de Palestina hay un pueblo que resiste.
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